Caminos de Santiago en España

Federación Española de Asociaciones de Amigos de los Caminos a Santiago

Qué debes saber como peregrino



Señalizacion

Otra de las cuestiones que preocupan al peregrino antes de salir, desconociendo cómo es el Camino, es si no se perderá.

Afortunadamente, creemos que la señalización es suficiente, pues además de las indicaciones y mapas que te proporcionamos en esta web, en cada cruce tendrás una señal de pintura amarilla, o un trozo de plástico amarillo colgando de una zarza, o incluso las marcas rojas y blancas de las GR, muy abundantes en el Camino.

También se está poniendo de moda plantar distintos árboles a la vera del Camino, por Navarra, La Rioja y en Galicia.

También nos están "construyendo" caminos artificiales, algunos con bastante acierto, desde Leboreiro a Lavacolla, pero, por el contrario, en el trozo de Sahagún a Mansilla de las Mulas, por el Burgo Ranero, nos estropearon uno de los parajes más bonitos, para construirnos un "carril peregrino". Moda que se ha extendido a muchos otros parajes y donde no se nos ha ocurrido otra cosa que realizar un firme de gravilla, para que drene bien en caso de lluvia, pero que constituye un auténtico suplicio para los pies del peregrino e inseguridad para los caballos y ruedas de las bicicletas.

Señalizacion

Ya en Galicia, desde poco antes de Cebreiro, cada 500 metros, tienes un mojón de granito que te indica los Km. que te quedan hasta Santiago y el paraje donde estés.

Y nos queda, por último, la mejor señalización, siempre que sea de día y esté despejado el tiempo: EL SOL.

El será nuestro guía a lo largo del Camino; por la mañana temprano nos dará en la parte izquierda de la nuca, a media mañana, en el brazo izquierdo y a la hora de ponerse, en la parte izquierda de la cara, pues el Camino discurre en una linea casi perfecta de Este a Oeste.

Albergue

Hace unos pocos años, cuando se inicia el renacimiento de la peregrinación a Compostela, a finales de la decada de 1980, no existían albergues de peregrinos. Entonces los peregrinos eran acogidos por beneméritos particulares, parroquias y ayuntamientos, bien en casas u otro tipo de dependencias que estuvieran libres de uso a la hora de la llegada de los peregrinos a los pueblos, al atardecer. Luego esa acogida se fue institucionalizando y dió paso a los albergues que hoy conocemos.

ste fenómeno se vio arropado por la aparición de los Hospitaleros Voluntarios, cuyo primer germén floreció gracias a la aventura de una peregrina, Lourdes Lluch, que en 1991 alquiló una casa en Hornillos del Camino y durante los meses veraniegos se dedicó a acoger peregrinos. Su ejemplo cundió rápidamente y para finales de aquél año la Federación Española de Asociaciones de Amigos del Camino de Santiago pone en "Camino" a las primeras generaciones de Hospitaleros Voluntarios e instituye un programa de actuación: Los Hospitaleros Voluntarios serán peregrinos veteranos que dedicarán gratuitamente parte de su período de vacaciones a atender un albergue. Esta gratuidad de los Hospitaleros implicaba que el albergue también era gratuito.

Luego, a partir del Año Santo de 1993, la afluencia de peregrinos desborda año tras año todas las previsiones, los albergues se quedan pequeños y cada año surgen nuevos albergues, tanto creados por instituciones como por particulares, para cubrir esa necesidad de acogida. Solo que, para cubrir los gastos que conlleva la gestión de un albergue y ya que los peregrinos no suelen ser muy generosos en sus donativos, las instituciones o particulares que rigen muchos albergues establecen una pequeña cuota, o donativo fijo, a cada peregrino. Mientras tanto, los Hospitaleros Voluntarios han permanecido fiel a su espírtitu de gratuidad y tan sólo atienden los albergues donde no se cobra nada a los peregrinos. La realidad actual, es que aumentan los albergues de pago y disminuyen los gratuitos que tan sólo se mantienen de los donativos voluntarios que dejan los peregrinos.

Hay que tener muy en cuenta, que muchos albergues, sean parroquiales o municipales, no cuentan con ningún tipo de subvención, por lo que se mantienen con la "voluntad" de los peregrinos, que a veces no es mucha, lo que puede poner en peligro su continuidad, pues tienen una serie de gastos de limpieza, electricidad, mantenimiento, etc,. que deberíamos sufragar mediante nuestras pequeñas aportaciones, los que los utilizamos; es aconsejable, por no decir obligatorio, dejar en el cepillo correspondiente la voluntad, pensando que estamos favoreciendo a los que vienen detrás de nosotros.

Como ejemplo, en el refugio de Belorado, existe un "bote" que indica "para la comida de mañana".

Hospitaleros

Este "bote" lo colocó en su día Ana María, una extranjera, que al igual que otros muchos e incluso Asociaciones de Amigos del Camino, ceden parte de sus vacaciones y se vienen a trabajar a un albergue, habiéndose recuperado la figura medieval del "hospitalero", persona, generalmente antiguo peregrino, que está en un albergue para ayudar a los peregrinos en todo lo que necesiten, manteniendo las instalaciones y servicios en condiciones, realizando pequeñas tareas de cocina, dando ánimos y consejos a los peregrinos, curándoles las ampollas, etc., son los nuevos ángeles del Camino que desinteresadamente se prestan a atenderte.

Si algún día te animas a imitarles, ten en cuenta que será simplemente otra forma de realizar el Camino, y no menos gratificante que andando. Ponte en contacto con alguna Asociación de Amigos del Camino de Santiago.

Hay que tener muy en cuenta, y más ahora que también se han puesto de moda los vehículos de apoyo, que en los albergues no existen RESERVAS, es decir, el que llega primero es el que ocupa el sitio, y no es válido el que llegue alguién en coche y coloque en las camas o literas las mochilas de los que vienen andando.

Asimismo, deberás utilizarlos y dejarlos en perfectas condiciones, pues detrás de ti,vendrá otro peregrino al que le apetecerá encontrarse todo en perfecto orden. También acostarse a una hora prudencial, que no debería ser después de las 23 horas, pues aunque tú no tengas previsto madrugar mucho, seguro que otros peregrinos se levantarán a las 5 ó 6 de la mañana.

Por la mañana, levantarnos haciendo el menor ruido posible, para lo que será conveniente que hayamos dejado prácticamente preparada la mochila.

Con respecto a los ciclistas, y teniendo en cuenta que éstos tienen más facilidad para recorrer más km. se les aconsejará, nunca se les obligará, que traten de pernoctar en determinados albergues que tienen mayor capacidad de acogida, pues en los de pocas plazas terminarían copándolas al llegar los primeros, y ser más difícil para el que va andando hacer unos cuantos km. más.

Credencial del Peregrino

La ‘Credencial del Peregrino’ La Credencial o acreditación del Peregrino es el documento entregado a los peregrinos en la Edad Media como salvoconducto. Se puede conseguir solicitándola personalmente en las Asociaciones de Amigos del Camino de Santiago.

La ‘Credencial del Peregrino’ es un documento personal que acredita tu condición de peregrino jacobeo como tal, por lo que deben figurar en ella tus datos personales y los relacionados con tu peregrinación. Su fin es identificarte como peregrino, por este motivo, debe estar correctamente complimentada, y debe usarse para identificarse como tal cuando se solicite (normalmente, en los albergues). Debes tener claro que la credencial te identifica como peregrino, pero no te da derechos.

La ‘Credencial’ te sirve para documentar tu peregrinar, sellándola al inicio y a lo largo del Camino en las localidades donde pernoctes. Deberás sellar la credencial dos veces cada día durante tu recorrido por territorio español. Sirve para llevar constancia de tu peregrinación mediante los sellos con fecha de paso por los diferentes lugares. Puede además sellarse en los albergues por los que se pase, aunque no se pare, y también en iglesias, Oficinas de Turismo, puntos de información públicos… y en muchos otros establecimientos por los que pasa el Camino.

La credencial te acredita como peregrino, y es el documento que te van a solicitar si al llegar a Santiago quieres obtener la Compostela. Además, es un recuerdo perfecto de la peregrinación, pues nos ha acompañado cada día y nos recordará los sitios por los que hemos pasado.

Las Asociaciones son las encargadas de facilitar las credenciales a los Peregrinos y también de proporcionarlas a Albergues que las soliciten. Así pues, puedes pedir información a cualquier asociación de la Federación, mejor a la más cercana a tu domicilio o al lugar dónde inicies tu peregrinación y te informarán dónde conseguirla. En nuestro Directorio de Asociaciones, te facilitamos las direcciones y contactos de las que están funcionando en este momento.

En el lugar en que iniciemos nuestra andadura, nos certificarán el día y forma en que realizamos el Camino, a pie, en bicicleta, a vela o a caballo. A lo largo del Camino, generalmente en los albergues, nos pondrán el sello y la fecha, y una vez lleguemos a Santiago, acreditando que hemos recorrido:

  • Peregrinación a pie o a caballo: haber realizado 100 km.
  • Peregrinación a vela: haber navegado 90 millas náuticas y recorrer a pie el resto del Camino desde el puerto de desembarque.
  • Peregrinación en bicicleta: haber recorrido 200 km (excluyendo la bicicleta eléctrica)
  • Peregrinación en silla de ruedas: por tratarse de un caso excepcional, contactar con el Centro Internacional de Acogida al Peregrino.
podremos, en la Oficina de Acogida al Peregrino que existe en la Catedral, obtener la "compostela", siempre y cuando nuestra peregrinación haya sido por motivos religiosos, espirituales o de búsqueda interior; caso contrario, existe otro tipo de certificación que también se entrega en la referida oficina.

La compostela

Al finalizar la peregrinación, la S.A.M.I. Catedral de Santiago otorga al peregrino la "Compostela", un documento histórico, escrito en latín, que acredita la realización de la peregrinación hacia la tumba del Apóstol Santiago con sentido cristiano (“devotions affectu, voti vel pietatis causa”) por cualquiera de los caminos oficiales reconocidos por la misma. Los requisitos para obtener la compostela presentando la credencial del peregrino son los siguientes:

  • Peregrinación a pie o a caballo: haber caminado los últimos 100 km por cualquiera de las rutas reconocidas como oficiales por la S.A.M.I. Catedral de Santiago.
  • Peregrinación a vela: haber navegado 100 millas náuticas y terminar el resto del Camino a pie desde el puerto en el que se haya desembarcado, con los correspondientes sellos en la credencial de las etapas que se hagan a pie.
  • Peregrinación en bicicleta: haber recorrido los últimos 200 km por cualquiera de las rutas reconocidas como oficiales por la S.A.M.I. Catedral de Santiago.
  • Peregrinación en silla de ruedas: por tratarse de un caso especial, contactar con el Centro Internacional de Acogida al Peregrino.
  • En la credencial deberán figurar al menos dos sellos por día con la fecha correspondiente, obtenidos en cualquier establecimiento con la finalidad de acreditar la estadía en dicho lugar.
  • Realizar la peregrinación hacia la Tumba del Apóstol Santiago con sentido cristiano: «devotionis affectu, voti vel pietatis causa» por cualquiera de los caminos oficiales reconocidos por la S.A.M.I. Catedral de Santiago.

Otras normas para tener en cuenta:

  • La Compostela sólo se otorga al peregrino de manera presencial e individual. No se expide en nombre de terceros, al igual que no es posible tramitarla mediante comunicación telefónica ni telemática.
  • Se puede hacer el Camino por etapas, siempre y cuando éstas estén ordenadas cronológicamente y geográficamente. Sin embargo, si se hace solamente la distancia mínima exigida (últimos 100 ó 200 km), se debe sellar siempre al inicio y al final de cada etapa, incluyendo la fecha correspondiente, de forma que se vea que el peregrino ha retomado el Camino en el mismo lugar en el que lo había abandonado (es decir, se debe sellar siempre en el lugar en que se comienza, aunque ya hubiéramos sellado en el mismo sitio al terminar la etapa anterior).
  • La meta del Camino es la Tumba del Apóstol en la ciudad de Santiago de Compostela, por tanto, se peregrina en este sentido. Cuando se emprende la peregrinación, se elige un camino oficial y se peregrina por la misma ruta elegida, sin alternar ni mezclar las rutas de peregrinación.
  • Los niños que hagan la peregrinación con sus padres o en grupos, y que han recibido el sacramento de la Comunión, o que tienen la capacidad de comprender lo que significa la naturaleza espiritual o religiosa del Camino, pueden recibir la “Compostela”. Si no son lo suficientemente maduros debido a su corta edad, se les concede un certificado especial con sus nombres. En el caso de bebés o de niños muy pequeños se incluye sus nombres en la “Compostela” de sus padres o del adulto acompañante. Les rogamos que, en caso de duda, contacten con nosotros en la Oficina del Peregrino, para examinar cada caso en particular.
  • Una vez en el Centro Internacional de Acogida al Peregrino (Rúa Carretas, 33 Santiago de Compostela) el peregrino debe registrarse escaneando un código QR. Posteriormente, la aplicación solicita cubrir una serie de datos. Al finalizar, se recibe un código alfanumérico mediante correo electrónico o mensaje. Este código junto con la fecha en la que se ha realizado el registro es el que el personal de la oficina le va a requerir, por eso es importante tenerlo escrito en la credencial, en el espacio habilitado para ello.
  • Con el Registro del Peregrino cumplimentado, se obtiene un ticket con un número de turno para recoger la Compostela. Este ticket viene impreso con un código QR que permite conocer en tiempo real el estado de tiempo de espera.
  • La Compostela es un documento gratuito.

La Compostela se entrega al peregrino de manera presencial, no se expide en nombre de terceros, al igual que no es posible tramitarla mediante comunicación telefónica ni telemática.





Vista la petición de varias Asociaciones Extranjeras, Cofradías, la Asociación Gallega de Amigos del Camino de Santiago, así como el Concello de A Coruña y varias Instituciones jacobeas, para que se conceda la Compostela a los peregrinos que parten de la ciudad herculina en peregrinación al sepulcro del glorioso Apóstol Santiago, se acuerda, con el Vº Bº del Sr. Arzobispo, que se pueda expedir dicho documento a los siguientes peregrinos:

  • Dada la tradición, históricamente documentada, de la llegada de numerosos peregrinos a través del puerto coruñés, se concede la posibilidad de obtener la Compostela a aquellos que, habiendo hecho parte del Camino en sus países o regiones de origen, hagan a pie la distancia que separa el puerto de A Coruña de la Catedral Compostelana.
  • Asimismo, a los habitantes de la ciudad de A Coruña y sus alrededores que, devotionis causa, visiten los espacios jacobeos de su ciudad, y hagan el resto de la peregrinación a pie hasta el sepulcro del Apóstol Santiago.
  • En lo referente a los peregrinos o caminantes que no reúnan estas condiciones, podrán recibir, sin embargo, el documento acreditativo de haber visitado la Catedral y el sepulcro del Apóstol Santiago.


  • Camino Inglés: Ferrol
  • Camino del Norte: Baamonde
  • Camino Primitivo: Lugo
  • Camino Francés: Barbadelo
  • Camino Portugués: Porriño, también se admite la Variante Espiritual si han comenzado en Porriño, pero no en Pontevedra. Desde Vigo, si comienzan en la Parroquia de Santiago, pueden recibir la Compostela, desde allí hay 101 kms
  • Camino Sanabrés: Ourense
  • Camino de Invierno: Chantada
  • Y para el de Muxia-Fisterra: deben hacer Muxia – Fisterra – Santiago o Fisterra –Muxía – Santiago.
Misa del Peregrino

Nadie puede dudar de la importante presencia espiritual y religiosa en el Camino, una gran cantidad de peregrinos inicia esta aventura por estos fines principalmente, y muchos otros perciben, a lo largo de su recorrido, la necesidad de "conectar" espiritualmente buscando para ello el cobijo de las iglesias.

Desde el momento de nuestra partida y durante todo el trayecto podremos con casi total probabilidad de disponer a diario de la denominada "misa del peregrino", oficio que se nos ofrecerá por norma en la misa de las 20:00 horas, como decimos en la casi totalidad de poblaciones que cuenten con oficiantes para ello. Se denomina de este modo por estar especialmente destinada a ellos y permitir su participación: los sacerdotes acompañantes pueden concelebrar y se saluda expresamente a los grupos.

Desde la popular de Roncesvalles en la cual, a su finalización, se bendice al peregrino en tantas lenguas e idiomas como paises se vean representados por ellos hasta llegar a la de Santiago de Compostela, que por su gran cantidad de peregrinos puede llegar a celebrar varias cada día, normalmente la de las 12:00 y las 18:00 horas. En Años Santos se ofician con mayor cobertura a las 10:00 y a las 12:00 horas en los servicios matutinos y a las 18:00 y las 19:30 horas durante la tarde.

Botafumeiro

Durante la celebración de la misa del peregrino en Santiago de Compostela se puede observar, en algunas ocasiones establecidas, el uso del popular Botafumeiro, volando a lo largo de la nave central del templo compostelano. La puesta en funcionamiento de este gigantesco incensiario puede conseguirse tambiéen mediante las donaciones de grupos interesados. Las tarifas rondan alrededor de 300 euros. La Iglesia mantendrá por su cuenta el vuelo del botafumeiro en veinticinco ocasiones solemnes. De forma orientativa indicamos los días que se puede ver el Botafumeiro en alguna de las misas en el Altar Mayor:

  • Epifanía del Señor 6 de Enero
  • Domingo de Pascua de Resurrección Semana Santa
  • Ascensión del Señor 40 días después de Pascua
  • Fiesta de la aparición del Apóstol
  • Pentecostés 50 días después de Pascua
  • Martirio del Apóstol Santiago 25 de Julio
  • Asunción de la Virgen María 15 de Agosto
  • Todos los Santos 1 de Noviembre
  • Cristo Rey 5º domingo antes de Navidad
  • Inmaculada Concepción 8 de diciembre
  • Natividad de Nuestro Señor 25 de Diciembre
  • Traslación de los restos del Apóstol 30 de Diciembre
El resto de los días se utiliza un incensiario, también realizado en metal blanco, conocido como La Alcachofa.

El origen del Botafumeiro se sitúa en 1554, construido gracias a una ofrenda del rey Luis XI de Francia. El original estaba elaborado en plata y fue robado por las tropas francesas en 1809 durante la Guerra de la Independencia. Al igual que otros incensarios de las iglesias, tiene un origen litúrgico. Sin embargo, éste es especialmente grande debido al gran número de peregrinos que llegan a Santiago, pesa unos 50 kilos y mide metro y medio de altura.

Finalmente os facilitamos un par de enlaces para información más detallada: