Los primeros rastros de poblamiento los encontramos en los campos de mámoas fechados en la Edad de Bronce. De la época castrexa son numerosos los vestigios, entre los que cabe destacar, Castro Montaz y Castro do Cura en Cortegada, y Castro de O Castro en A Eira dos Mouros en Os Castros-Silleda. Otros ejemplos a reseñar, son: los petroglifos de A Pena das Cazolas, A Peneda do Encanto, la Mámoa da Braña, los grabados de Primadorno. También los brazaletes de oro de 24 kilates encontradas en el lugar de Barravaite, en Lamela, hoy en el Museo de Pontevedra forman parte del rico patrimonio histórico.

Silleda entra en la historia, durante la época sueva en el siglo VI. Segun las "Escrituras Lucenses" del Concilio de Lugo que se celebro en el año 569, siendo obispo Nitigio y reinando Teodomiro, se acordó hacer una nueva división de la diócesis y otra de los condados. Por este acuerdo se constituyó el Condado de Deza que comprendía las tierras de Deza, TRASDEZA (Silleda), Carbia y Dozón. La historia de Silleda, y durante siglos la misma que la del Condado de Deza, al que pertenece. El primer conde fue Andeca.

Entre los siglos XI y XIII se levantaron numerosas iglesias románicas de muy hermosa fábrica entre las que merece la pena visitar, Ansemil, Breixa, Dornelas, O Castro y Taboada.

De la época feudal datan importantes torres y fortalezas; así: Chapa, Cira, Costela, Férveda, Rellas, O Foxo, desaparecidas en su mayor parte. Tan solo Cira conserva majestuosa la torre del homenaje.

La etapa de los pazos dejó importantes ejemplares como los de Trasfontao, Cascaxide, Paizás, Viña, Marza, Fares y Sestelo.

la Edad Contemporánea trajo a Silleda un nuevo período de luchas. La invasión francesa altero la pacífica convivencia de los vecinos de estas tierras, escenario de luchas contra el invasor en Taboada, Cira e Bandeira. La histórica fecha del 3 de marzo de 1809 cuando se reunieron los abades de dieciocho parroquias de Trasdeza con muchos vecinos para empuñar las armas contra los franceses en defensa de la Religión, la Patria y el Rey.

Estas situaciones bélicas traerían continuación con las luchas entre carlistas e isabelinos-Moalde, Casa do Monte, Bandeira - y mas tarde con los violentos enfrentamientos de los agraristas por la redención de los foros, hecho este que sucedió a finales del S. XIX con los levantamientos producidos en Refoxos y Paizás, en rebelión contra los impuestos y las a rentas.

La Villa de Silleda, es desde 1853, la capital de la Tierra de Trasdeza. Años antes, la capital del concello estuvo en Chapa, Escuadro y O Foxo, lugares de cierta importancia hasta principios del siglo pasado, en que la naciente vila, gracias a sus ferias, mejoras en las comunicaciones y la inquietud emprendedora de sus gentes, consiguió un increíble desarrollo.

Su iglesia dedicada a Sta Baia existía antes del año mil y ya con nombre de Exilieta figura en una donación hecha al obispo Don Pelaio de Lugo en 998. Así mismo aparece con ese nombre entre las favorecidas en el testamento de Teresa Sánchez de Gres, en el año 1395.