El perfil de esta etapa consiste en una fuerte subida al inicio, una meseta intermedia con un recorrido más o menos llano durante la gran parte de la misma, y al final una bajada prolongada, cruzando la Sierra de la Solana. El paisaje más característico de la etapa son densas masas forestales y, debido a la ausencia de lugares donde abastecerse, es necesario salir bien provisto de alimentos y bebida. La mayor parte del recorrido se realiza por tranquilos caminos de tierra, excepto un tramo asfaltado como variante para bicicletas. La única localidad de paso es Villaescusa de Palositos, pueblo deshabitado que fue adquirido por un propietario privado, y que luego fue vallado, arrasado y convertido en finca de caza particular, cerrando el paso por los caminos públicos. El recorrido por el mismo se incluye como alternativa a la ruta principal. El gran atractivo de esta etapa es la belleza y tranquilidad del entorno natural que atraviesa, por varias áreas forestales de espesa vegetación. En primer lugar, parte de la subida desde Salmerón y el tramo recto por el camino de Peralveche. Al final de la etapa, la mayor parte del tramo de bajada hasta Viana de Mondéjar, desde donde se puede disfrutar de unas bellas vistas a las Tetas de Viana. Itinerario Desde la plaza Mayor de Salmerón se sale por las calles Arco y Lechuga, y luego por un camino de tierra hasta cruzar el arroyo de San Juan. A partir de ahí se inicia un ascenso pronunciado por una ladera, incluyendo varias curvas cerradas en zig-zag, pasando de un paisaje de tierras de cultivo a otro de monte bajo cuyo arbolado se va haciendo más espeso a medida que ganamos altura. Al llegar a la cima, se habrán ganado casi 300 m de altitud en 3,5 Km. A continuación, se inicia un largo tramo a través de una meseta por un amplio camino de tierra completamente rodeado de bosques que al principio va en dirección norte y luego enlaza con otro camino que va virando hacia el noreste en dirección a Peralveche. En mitad de un tramo completamente recto rodeado de árboles, tomar un desvío hacia el noroeste que se adentra en una zona más abierta de campos de cultivo. Poco más adelante se llega a una bifurcación donde se pueden elegir dos opciones: a) Siguiendo por el lado derecho, se continúa por el carril de Pareja, que es un camino llano de las mismas características que el anterior y que discurre al pie de una ladera. A los 2,8 Km hay que tomar un desvío hacia el oeste por una zona de bosque cerrado, que más adelante se va abriendo hasta llegar a un cruce de caminos. b) La alternativa por la izquierda es el camino de Escamilla, que lleva en dirección oeste directamente a Villaescusa de Palositos. Este pueblo abandonado fue demolido por un empresario sin escrúpulos, y el acceso está bloquedo por una valla, aunque se trata de un camino público. El trazado sigue en dirección noroeste hasta el mismo cruce de caminos indicado antes. A partir de aquí hay que cruzar una llanura cubierta de campos de cereales, y luego se entra nuevamente en una zona cubierta por un espeso bosque, donde se inicia un pronunciado descenso que se prolongará a lo largo de 2,7 Km. Al final del descenso, una estrecha vereda nos llevará por la ladera de un monte hasta desembocar en el arroyo de la Solana, que acaba en el cruce con la carretera CM-2053, junto a las ruinas de un antiguo Molino, y que nos dirige a la entrada de Viana de Mondéjar. Este sendero no es apto para bicicletas, que deberán continuar por el camino anterior en suave descenso hasta la carretera, y luego seguir por la misma durante 1,7 Km hacia el oeste. El camino de acceso al pueblo desde la carretera luego se desvía por la calle Andrés Sierra y continúa por la calle Mayor.